Chia pudding con helado crudivegano de cerezas
Hello!!! Os escribo con mucha prisa porque estoy atrasadísima en la escuela de nutrición y pronto son los exámenes, tengo un evento el viernes en el Club Naútico de Palma de Mallorca donde estaré haciendo batidos con superalimentos de Iswari y además me estoy dando el lujo de ir todos los días a la playa unas cuantas horas, porque la verdad es que ya tenía ganas de unas semi vacaciones. Aun así, tenía pendiente esta receta y quería dejárosla en pleno auge del verano porque la váis a disfrutar un montón. De esta manera, queridos lectores, voy a ser breve.
Por cierto, si váis al evento de vela este viernes, estaré de 18:00 a 19:00 creando un batido especialmente diseñado para deportistas con motivo de la Copa del Rey de Vela. Va a estar delicioso y súper nutritivo, ¡¡os encantará!! 😀
En cuanto a la receta de hoy, se trata de un pudding de chía con un suculento helado de cerezas y toppings antioxidantes, deliciosos y muy saludables. Este capricho healthy nos provee con grasas vegetales de buena calidad y además está especialmente pensado para gente que debe llevar una dieta muy baja en azúcares. Está endulzado con estevia en polvo orgánica y os aseguro que no se nota para nada, lo digo para los que no sois muy fans de ella. ¿Confiáis en mi? Pues vamos allá con el proceso hiper sencillo.
Ingredientes para nuestro postre helado (2 raciones)
- 1 lata de leche de coco con alto porcentaje en grasa
- 4 cucharadas soperas bien colmadas de semillas de chía
- 1/2 aguacate maduro (congelado en trocitos)
- 2 Tazas de cerezas congeladas (aproximadamente 400g)
- 1 cucharadita de estevia orgánica en polvo
- 1 cucharada sopera de mantequilla de almendras (también podéis usar tahini o mantequilla de cacahuete)
- Toppings: Frambuesas y arándanos congelados, bayas de goji, nibs de cacao, chips de coco y una cucharadita de açaí en polvo (el superalimento antioxidante por excelencia)
Preparación del chia pudding con helado
- Lo primero es congelar las frutas la noche antes: frambuesas, arándanos, el medio aguacate bien maduro en trocitos, las cerezas deshuesadas… La clave para que este helado quede perfecto es que el aguacate esté en su punto, si no puede que nos queden trocitos, tenedlo en cuenta.
- La noche antes también vamos a poner en un bote de cristal la leche de coco con las semillas de chía y revolvemos bien. Tapamos y dejamos reposar toda la noche en la nevera para que se forme el pudding de chía. Utilicé esta leche porque el pudding queda super cremoso y además el coco le aporta un toque dulzón, con lo cual ya no tendremos que ponerle ningún endulzante.
- Al día siguiente, sacamos las cerezas y el aguacate del congelador y dejamos reposar unos minutos a temperatura ambiente mientras posicionamos nuestro chia pudding, que ya debe tener la textura idónea, en los dos bowls.
- En un procesador de alimentos, thermomix o batidora muy potente, posicionamos el aguacate, las cerezas y la mantequilla de almendras. Trituramos hasta que se forme el helado. Seguramente necesitaremos abrir el procesador y ayudarnos de una lengua para bajar los trozos y acomodar la mezcla para que nos salga el helado perfecto. Cuando ya casi tenemos la textura de helado, añadimos la estevia y volvemos a batir. ¡¡Listo!!
- Hacemos bolas de helado y las repartimos en los dos bowls, decoramos con frambuesas y arándanos congelados, bayas de goji, nibs de cacao, chips de coco y la cucharadita de açaí entre los dos. Comemos inmediatamente.
Voilà voilà!! Una merienda, postre o desayuno fresco, llamativo y riquísimo. La mezcla de todos estos sabores os va a cautivar y además, 100% sin culpa, apto para todos y con gran poder antioxidante. ¡¡Ya me contaréis!!
¡¡Hasta la semana que viene!! Volveré con un plato de «pasta» vegetal que os va a sorprender.
Bisous!! <3 <3