Tarta de la abuela crudivegana

¿Os acordáis de la clásica tarta de galletas que alternaba capas de crema pastelera y chocolate espeso? Siempre fue la tarta de los cumpleaños en mi casa, qué rica estaba, con su toque de vino dulce, era una explosión de sabores, pero que poco saludable, ahora no podría ni imaginar volver a comerla, llena de azúcar, refinados, lácteos…

Hoy en día, no he dejado de lado las tartas, ¡¡me encantan!! Bueno, eso ya lo sabéis 🙂 El haber conseguido esta maravilla de tarta me ha hecho muy feliz porque está tan buena como la que yo recuerdo, diferente, pero con reminiscencias a ella, el toque de cereza me recuerda al vino dulce, la crema de cacahuetes al típico flanín y el chocolate crudivegano al chocolate a la taza tan intenso. ¡Es brutal! Y lo mejor… la galleta crudivegana que tu mismo puedes crear sin deshidratadora. No digo más, os muestro como hacerla y os aviso que es densa, esta tartita que sale en las fotos nos duró dos días y éramos cuatro personas en la hora del postre, es decir, que un trozo pequeño es suficiente para no empalagarnos y disfrutarla al máximo. Vamos por partes…

Nuestra galleta crudivegana

• 2 tazas de copos de avena sin gluten (vienen a ser unos 400 g)
• 2 tazas de uvas pasas (sobre 400 g)
• 2 cucharadas soperas de manteca de cacao derretida

Lo metemos todo en el procesador (menos la manteca) y lo deshacemos un poco hasta que comience a pegarse y formar nuestra masa de galletas. Por último, añadimos la manteca, procesamos un poquito más y ya la tenemos preparada.

Ponemos la masa entre dos papeles de horno y la estiramos bien con un rodillo para que quede finita. Con un cuadrado (tipo aro de emplatar) hacemos los cuadrados y los reservamos para luego posicionar en nuestra bandeja de tarta. También podemos hacerlos redondos, más grandes, más pequeños o de la forma que queramos. Es más sencillo de lo que parece.

Cobertura de crema

• 200 g de cacahuetes tostados sin sal (podéis usar otro fruto seco si no os gustan los cacahuetes, ya que son una legumbre en realidad, por ejemplo anacardos, almendras, avellanas, cualquier crema de fruto seco vale)

Hay mucha gente en contra de los cacahuetes, pero yo la verdad creo que por consumirlos muy de vez en cuando, no pasa nada. La crema de cacahuetes es muy rica y le da un toque a la tarta que deberías probar, no sé si con otra crema quedaría tan rica. Así está hipermegadeliciosa.

Para hacerla vosotros mismos, peláis los cacahuetes y los procesáis un rato hasta que ellos solos formen la crema (sin aceites, sin agua…). Es mágico.

Cobertura de chocolate

• 1 aguacate grande
• 2 cucharadas soperas de cacao crudo. Si no queréis cacao, puede ser algarroba también, a mi me encanta porque es ya de por si dulcita.
• 4 cucharadas soperas de sirope de coco
• Una pizquita de sal rosa del Himalaya

Todos los ingredientes al procesador hasta conseguir una textura cremosilla  y ¡¡ready!!

Cobertura de cerezas

• Sobre 12 cerezas grandes deshuesadas
• 4 higos secos puestos en remojo unas horitas (yo los puse 4h)

¡Cómo utilizo la procesadora! jajaja, lo mismo de siempre, todo a ella hasta formar nuestra mermelada.

Montaje de nuestra tarta

Es muy sencillo. Disponéis alternativamente capa de galleta, capa de crema de chocolate, galleta, crema de cacahuete, galleta, mermelada y voilà voilà ¡¡Tarta de la abuela deliciosa!! Ahh no os olvidéis de las hojitas de stevia y la cerezita 😉

Qué sencilla la cocina cruda, con solo un aparato haces tantas cosas, recordad que un día es un día, olvidaos de las mezclas de alimentos y las grasas por hoy, de si estáis comiendo cacahuetes que no son tan buenos…. Pensad una cosa muy importante, sigue siendo una tarta muy sana sin azúcar, sin lácteos, sin harinas, solo con frutas, cereales y endulzantes naturales. ¡¡A disfrutar!!

Hasta el lunes, bisous!! <3 <3