Helado cremoso bajo en carbohidratos I Sin azúcar ni frutos secos

¡¡Cuánto tiempo sin pasar por aquí!! Mis disculpas 🙁 La verdad he vivido una temporada bastante estresante con todo el tema de acabar la escuela y mis problemas de dermatitis atópica que se han agravado mucho esta primavera al dejar los corticoides tópicos. Es una larga historia la de mi enfermedad autoinmune, pero he tenido que hacer muchos cambios en mi dieta habitual para ver si mejora. Todavía estoy en el proceso, pero noto cambios positivos y eso ya me hace respirar tranquila. Una se cuida para seguir enferma.. ¿algo va mal no? Me centro tanto en promover la salud e inspirar a los demás, que a veces me olvido de mi misma y eso no puede ser. Por ello he tenido que soltar cargas para centrarme en mi sanación y sobre todo relajación. Siempre lo digo, la alimentación es una parte, pero el resto es demasiado importante, ni todas las verduras del mundo podrán con el estrés.

Una de las cosillas que he tenido que adaptar para recuperar mi flora intestinal y deshacerme de las bacterias malas ha sido bajar mi consumo de carbohidratos y azúcares naturales (porque azúcares de otro tipo yo ya no consumía), me refiero a frutas, cereales sin gluten, legumbres, frutos secos, frutas deshidratadas… Ha sido un poco duro porque amo las frutas frescas, pero lo bueno es que yo soy un camaleón, me adapto a todo muy rápido y la verdad es que me gusta cualquier alimento. El problema vino un poco cuando me di cuenta que las recetas del blog iban a ser un tanto aburridas, afortunadamente las verduras llegaron al rescate. ¿Os podéis creer que el helado de hoy es a base de coliflor? Más sano, imposible.

Me encanta la cremosidad que le aporta y las propiedades anticancerígenas que posee, puro azufre para el cuerpo. Además, el helado lleva las especias perfectas para hacerlo digestivo y dulce, ya que estas resaltan el dulzor natural de este preciado vegetal crucífero. A mi me fascina y espero que a ti también 🙂

Ingredientes y preparación para 1 helado grande

• 300 g de flores de coliflor cocidas y congeladas
• 100 ml de leche de coco Aroy-D (al menos 60% coco)
• 1 cucharadita de cúrcuma en polvo
• 1/2 cucharadita de canela de Ceylán en polvo
• 1/2 cucharadita de estevia verde en polvo 
• Pizca de comino en polvo (opcional)
• Pizca de sal rosa de Himalaya
• Decoración: Chips de coco y canela

1. Primero, cocer la coliflor, dejar enfriar, secar un poco con un paño y congelar en un tupper o bolsa.
2. Al día siguiente, sacar del congelador 10 minutos antes de hacer el helado.
3. Disponer en la batidora de vaso la leche de coco primero, la coliflor, la estevia (si no la encuentras, puedes poner 1 cdta de xilitol) y todas las especias. Si tienes mi batidora Optimum G2.1 , solo debes seleccionar el programa de sorbetes y utilizar la barra presionadora que trae la batidora para ayudar a la mezcla a batirse bien y quedar perfectamente homogénea. Si no la tienes, puedes hacerlo con un procesador de alimentos o batidora convencional añadiendo más leche o parando de vez en cuando para bajar la mezcla con una cuchara.
4. Servir en un vaso de helado o bowl con los chips de coco y canela espolvoreada por encima. ¡¡A disfrutarlo 100% sin culpa!!

Lo mejor de este helado es que lo puedes comer perfectamente como postre, ya que no contiene fruta que interfiere con tu digestión, es como repetir platillo salado, pero en versión muy caprichosa.

Un beso enorme y hasta la próxima 🙂

Elisa